sábado, 6 de agosto de 2016

DE BUENAS Y VIEJAS COSTUMBRES

Siempre he sido mujer de costumbres, muchas de ellas se han afianzado y acentuado a lo largo de los años, algunos me dicen que se han convertido en manías, otras han desaparecido o apenas son apreciables.

He de decir que aquellas que se han acentuado lo han hecho debido a que yo he puesto el empeño suficiente para que siguieran formando parte de mi vida y conservarlas.

Me gusta la costumbre de dar besos de buenos días y buenas noches a los miembros de mi familia, en esas ocasiones a que aún tenemos la suerte de compartir todos juntos, costumbres y recuerdos que me trasladan hasta mi infancia y adolescencia.
Provengo de una familia muy pequeña, esto nos ha hecho ser una piña y mantenernos unidos en lo bueno y en lo malo, al fin y al cabo sólo nos tenemos a nosotros.

Conservo la costumbre de llevar siempre un cuaderno de notas en mi bolso, siempre acompañado de bolígrafos de tinta verde y lápices. Sólo escribo con estos dos elementos, esto último sí es una manía 😊.

El cuaderno lo llevo desde bastante jovencita, le comencé a llamar cuaderno de ideas pero siempre se llenaba de escritos y pensamientos, la inspiración me asaltaba y lo sigue haciendo en cualquier momento y cualquier lugar y me gusta que me pille preparada.

Escribo en verde, gracias a mi profesora de música de primero de B.U.P, ella siempre lo hacía y nos contaba los beneficios de escribir en este color.
Hice toda mi carrera de Arqueología con apuntes tomados en este color, aunque nunca me dejaron escribir en verde en los exámenes, cuestión que me sigo planteando 20 años después y aún no encuentro ninguna respuesta.
Llevo un lápiz por sí falla el bolígrafo, pero no es un lápiz cualquiera, es un portaminas con minas de 0,7 mm, lo sé otra manía, pero las manías y costumbres han ido formando mi carácter y personalidad.

Guardo la costumbre de decir te quiero a aquellos que se lo merecen y que son dignos de mi cariño, "nunca dejes para mañana los te quiero que puedas decir hoy".
Guardo la costumbre de no irme enfadada a la cama, sin haber sonreído al menos una vez en ese día, y sin un sueño que cumplir y por el que luchar.

Sí soy de las que aún conservan y creen en las viejas y buenas costumbres.



No hay comentarios:

Publicar un comentario